Hay caprichos y caprichos. Algunos surgen de manera repentina y sin razón lógica. Y otros son fruto del deseo, el gusto y el deleite. A este segundo grupo pertenecen los vinos de Bodegas y Viñedos Gancedo. Capricho es el nombre de su blanco (dona branca y godello) y rosado (mencía) que se han convertido en el ‘capricho’ del Bierzo por su frescor, su equilibrio en boca y su entrada golosa. No es de extrañar que estos sean de los vinos más servidos a copas en el Bierzo aunque también elaboran tres mencías: Gancedo, Xestal y Ucedo.
Bodegas Gancedo está ubicada en Quilós, localidad perteneciente al Ayuntamiento de Cacabelos. Fue fundada hace más de 20 años pero hoy al frente del proyecto está José Cereijo con su familia, fiel al espíritu inicial y con los mismos vinos. ‘Mi padre decidió apostar por esta bodega porque le gustaba el proyecto y le gustaban sus vinos. La adquirió y ahora es mi familia quien dirige la bodega’, nos explica Alba Cereijo, hija de José.
Y si algo te gusta, mejor no cambiarlo. Por eso mantienen los mismos viñedos, la misma forma de trabajar y de elaborar los vinos. Con Alba, visitamos los viñedos. ‘Tenemos 80 hectáreas de viñedo, la mayoría son cepas viejas, muchas centenarias de mencía, godello y dona branca. Realizamos un cultivo ecológico (a punto de certificar), manteniendo la tradición vitícola de la zona que siempre ha trabajado de forma tradicional, con respeto a la tierra e integrado al entorno’. Y así es, aunque a veces esta integración les conlleve algún disgusto. ‘Al estar en altitud y rodeados de monte, tenemos muchos problemas con los animales, especialmente con el corzo y el jabalí’, reconoce.
Los viñedos están distribuidos en una especie de herradura alrededor de la bodega (Pieros, Canedo, San Miguel, San Juan de la Mata..), a una altitud de entre 600 y 750 metros sobre el nivel del mar. En San Miguel de Arganza, las cepas son de mencía y se asientan en suelos de cantos, arena y sustrato de roca caliza. Alba aprovecha para recolectar unas fresas plantadas junto al viñedo. ‘Me recuerdan al sabor del capricho rosado’, me dice.
El Godello lo tienen en Lamas del Picón, un total de 4 hectáreas plantadas sobre un suelo arenoso y pedregoso en la pendiente de una colina alrededor del castro romano del Picón. ‘Es una zona muy aireada, donde habitualmente no hay nieblas y eso hace que no tengamos tantos problemas con enfermedades como el mildiu o el oídio’.
La bodega y los vinos
Volvemos a la bodega. Es un edificio renovado hace unos pocos años, que cuenta con una bonita recepción de piedra y con el nombre de Gancedo destacado en letras con acabado en acero oxidado, simulando el oxido natural del hierro o del acero. La bodega se ha dotado de buena tecnología, depósitos de inox, sala para envejecimiento de barricas, otra para botellas, zona de embotellado, y la zona comercial para la administración y ventas. Y para rematar, cuentan con el buen asesoramiento enológico de Nacho Álvarez.
Y la ginda es una bonita sala de catas donde se recibe a las visitas, con un gran ventanal a modo de mirador. ‘Aún tenemos mucho por mejorar pero yo quiero apostar por el enoturismo y tengo proyectos en mente para potenciar y dar mayor visibilidad a los vinos del Bierzo’, explica con firme seguridad esta jovencísima berciana que, tras estudiar ADE y Marketing y un máster en enología, no duda en mirar al Bierzo y reconocer que no solo puede, sino que debe evolucionar en su vertiente enoturística para situarse al nivel de otras zona vinícolas internacionales. Sus años de Erasmus y, posteriormente, de vida en Italia le han permitido ver y comparar. Su entusiasmo y su avidez me dicen que no hay que perderle la pista, pues pronto dará mucho que hablar entre el sector.
De momento, ella es quien recibe a las visitas de turistas y aficionados y defiende los vinos de Gancedo con orgullo. ‘Elaboramos actualmente unas 150.000 botellas, de las cuales un 30% de destinan a la exportación pero no descartamos ampliar dado que la demanda ha crecido en los últimos años’. Actualmente producen seis vinos diferentes: Capricho Blanco y Capricho Rosado; Herencia del Capricho, con el godello y dona branca envejecido en barrica; Gancedo, cien por cien mencía; Xestal, mencía con doce meses de crianza y Ucedo, su tope de gama con selección de uvas de mencía de parcelas y cepas centenarias con 12 meses de crianza. Vinos, todos ellos, para representar con la cabeza bien alta al Bierzo y, sobretodo, para disfrutar.

Visitas y catas
Bodegas Gancedo tiene varios tipos de visitas:
Visita a la bodega + cata
Visita a la bodega + paseo en todoterreno por las viñas + cata
Visita a la bodega + paseo en todoterreno por las viñas + cata + degustación
673 265 953 / gancedo@bodegasgancedo.com
www.bodegasgancedo.com